Ocurrió en el Túnel de Cadí, en Barcelona, dirección Puigcerdá. Adelantó de manera temeraria a otro vehículo, saltándose la doble línea continua, y le lanzó un vaso en plena marcha. Unos kilómetros más adelante le esperaba un control de Mossos que le dio el alto y él intentó embestirles y huyó.
Tras intentar provocar un accidente con uno de los coches policiales que le seguía fue detenido. Sin carnet, con antecedentes y se negó a someterse a las pruebas de detección de drogas y alcohol.
