Hasta un reloj averiado da bien la hora dos veces al día.
Eso es lo que ha pasado esta mañana en el Congreso de los Diputados con el ‘indepe’ Gabriel Rufián. El diputado de Esquerra se ha sumado a la humillación pública del presidente de Gobierno, Pedro Sánchez en el Pleno de este miércoles que marca su avance totalitario bajo el eufemismo de la ‘regeneración democrática’ con la que ha amenazado a medios y jueces que no le bailan el agua.
En su turno de palabra, Rufián le ha hecho tres preguntas al socialista que le han borrado su sonrisa.