A simple vista estos dos vehículos se parecen tanto como una casa a un mosquito. No les une demasiado, y no están creados para lo mismo. Por ello se trata del pique más loco, un BMW Serie 3 e30 contra ¡un tanque! Sí, un tanque. Un vehículo creado exclusivamente para la guerra que se enfrenta a una berlina, una buena berlina, pero nada más. No tiene armas, que sepamos, como el Aston Martin de James Bond.