Ha pasado de ser centro de salud, a convertirse en centro de todas las protestas. En Tembleque (Toledo) hoy nos encontramos con muchos corrillos, pero con sólo un tema de conversación. Los vecinos llevan más de una semana pendientes del reloj y del teléfono. Nervios, a la espera de una resolución judicial que está tardando en llegar. Todos confían en que el tribunal manchego mantenga abiertas las urgencias nocturnas de forma definitiva. Si finalmente no es así, prometen seguir luchando.